(This post is also available in English) Mi nombre es Rampyari. Vivo en el pueblo de Gauna. Fui a la reunión “Mujer y Educación” en Mehroni. Allí vi una obra de teatro callejera. En la obra nos hablaron sobre las reglas del sistema de racionamiento en el que se nos venden granos alimenticios a bajo costo.
Cuando fui a recoger mi ración en la tienda me dieron 23 kilos de trigo y 12 kilos de arroz. Le di al propietario de la tienda cien rupias. No me devolvió cambio. Le dije que me devolviera cambio. Me dijo que por la cantidad de granos que me había dado la cantidad de dinero era la correcta.
Pero yo no cedí. Dejé el grano y comencé a caminar a mi casa. El propietario de la tienda de racionamiento comenzó a decirle a otro hombre que estaba por ahí: “Estas mujeres dalit se están creyendo mucho. Antes nunca gritaban. ¿De dónde han obtenido tantos conocimientos?” El hombre contestó: “Oh, van a estudiar a Sahjani Shiksha Kendra. Allí les dan ese tipo de información. Por eso han comenzado a exigir”.
Entonces el dueño de la tienda me llamó. “Por esta vez te llevas todo este grano y el mes que entra te daré la cantidad total al precio correcto”.
Yo pensé para mis adentros: ¡sólo sabré si dice la verdad hasta el mes que entra!
Texto colectivo de Parvati, 16 años, Sunita, 18, Kalawati, 14 y Hemantri, 16,
campesinas,Lalitpur, Uttar Pradesh, India, 2005.
Copilado por la: Revista Decisio, n° 19, enero-abril de 2008. Edición especial: Relatos de Personas Adultas en Alfabetización.
ENGLISH VERSION
Rampyari: “Knowledge has turned into our power”
My name is Rampyari. I live in the city of Gauna. I have attended the meeting “Women and Education” in Mehroni. There I saw a street theater play. In the works they talked about the rules of the rationing system under which they sell food grains at low cost.
When I went to pick up my ration in the shop they gave 23 kilos of wheat, and 12 kilos of rice. I gave the owner one hundred rupias. He gave me no change. I told him to give me my change, and he told me that the amount of grains he gave me corresponded exactly to the money I gave him.
I did not give in. I left the grains and walked back home. The salesman started talking to another man that was around: “Who these dalit women think they are? They never complained. Where do they learn all that stuff?” The man answered: “Oh, they are studying at Sahjani Shiksha Kendra. There they teach them all that stuff. That is why they’re starting to complain”.
Then the shop owner called me. “This time you take all these grains, next month I’ll give the total quantity for the correct price”.
I thought with myself: I will only know if he’s telling the truth next month!
Collective Text of Parvati, 16 years old, Sunita, 18, Kalawati, 14 and Hemantri, 16,
peasants, Lalitpur, Uttar Pradesh, India, 2005.
Source: Revista Decisio, No. 19, January-April 2008. Special Issue: Stories of Adult People Learning to Read and Write.